“Animo a ello”
Permitidme que inicie estas líneas recordando el cercano XII Congreso Nacional de la Abogacía 2019, que tendrá lugar del 8 al 11 de mayo en Valladolid. Como anteriores congresos éste adquirirá unas dimensiones magnas: 125 conferencias, sesiones y talleres; más de 200 ponentes; 2.000 congresistas; 70 expositores; una “feria tecnológica”; 10.000 m² de sede congresual…
Este encuentro se realizará a los 50 años del mítico Congreso de León, del que se desprendieron numerosas e importantes conclusiones en la configuración de la actual abogacía, así como en postulados que sustentan nuestra Democracia.
Tengo la seguridad que las múltiples y variadas intervenciones de tantos ponentes nos harán descubrir nuevos horizontes profesionales y nos advertirán sobre el futuro de nuestra profesión. Sinceramente creo que merece la pena asistir, y os animo a ello.
En el mismo mes de mayo tendremos la oportunidad de celebrar la festividad colegial, San Ivo. Y tendremos la satisfacción de rendir homenaje a más de un centenar de compañeros que cumplen veinticinco años de ejercicio profesional así como, muy especialmente, distinguir como Colegiados de Honor a nueve veteranos que cumplen cincuenta años de profesión. Asimismo será la oportunidad para que buena parte de compañeros se acerquen al Colegio -su casa- y disfruten de unos buenos momentos en unión de otros colegas. Igualmente creo que merece la pena participar, y os animo a ello.
La designación de los Colegiados de Honor se realizó en la Junta General Ordinaria celebrada el pasado 27 de marzo en la que se aprobaron las cuentas generales de ingresos y gastos del ejercicio 2018 -debidamente auditadas-, así como se expuso la reseña de las principales actuaciones realizadas por el Colegio en tal año. Merece la pena asistir, y os animo a ello.
En la citada Junta General tuve la oportunidad de informar verbalmente (información que ya se había hecho mediante circular) de un hecho que es muy relevante según mi criterio: la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Aragón por la que, estimado parcialmente el recurso contencioso administrativo presentado por el Colegio, declaraba la nulidad de un precepto del Reglamento que regula la Asistencia Jurídica Gratuita en el ámbito de la Comunidad Autónoma de Aragón (Decreto 161/2016). El precepto recurrido, de mantenerse, suponía una merma considerable -y sobre todo injusta- de los gastos que la Administración asume en lo referente a la organización y administración de los servicios de la asistencia jurídica gratuita en los que incurre el Colegio.
El proceso judicial se interpuso tras agotar todas las gestiones negociadoras que desplegó el Colegio con el Gobierno de Aragón tendentes a adecuar las previsiones gubernamentales a la realidad de las actuaciones que viene realizando el Colegio desde hace décadas. Pero cuando la negociación no resulta satisfactoria al menos nos quedan los Tribunales de justicia.
No obstante el resultado satisfactorio del proceso judicial, desde el Colegio se mantiene la voluntad de seguir negociando con el Gobierno de Aragón, negociación ésta que parece poco menos que inviable dado que éste ya ha anunciado recurso de casación contra la sentencia. Quizás nuestro Gobierno autonómico debería aplicarse a sí mismo lo que predica para los ciudadanos: negociación, mediación y diálogo (todo ello para evitar los litigios judiciales, no se olvide). Merece la pena que nuestros responsables políticos den ejemplo de lo que predican; les animo a ello.
Antonio Morán Durán
Por lo demás os aseguro que seguimos trabajando con entrega, interés y entusiasmo en el Colegio, teniendo en cuenta para ello a los nuevos Diputados que se han integrado en la Junta de Gobierno, así como otros compañeros que, cada vez con más incidencia, se suman a las numerosas Secciones colegiales. Precisamente a estos no les animo a ello, pues precisamente son quienes me animan a mí; y por ello les estoy profundamente agradecido.