XXV años del club de esquí y montaña del ReICAZ
Sagrario Valero Bielsa. Presidente Junta club REICAZ.

Me cuenta el que fue primer presidente del Club de montaña, Juan Antonio Iranzo, que corrían mediados de los años 90 cuando el entonces joven y dinámico Decano del REICAZ Carlos Carnicer encomendó al aún más joven y recién nombrado Diputado 9 de su Junta de Gobierno, Juan Antonio Iranzo, que idease alguna manera de atraer al colegio a abogados más jóvenes y a sus familias, promoviendo diversas actividades extra colegiales.

Como quiera que el mencionado Diputado 9 era muy aficionado al esquí y la montaña se le ocurrió la idea de aglutinar de forma oficial a un buen grupo de abogados y amigos que se saludaban por las montañas y las pistas de esquí. Así, un 1 de julio de 1996, se firmó el documento de constitución del Club Deportivo Elemental “Club de Esquí y Montaña del Real e Ilustre Colegio de Abogados de Zaragoza”, siendo sus promotores Kico Dufol, Paco Frej, Pepin Fdez. de Baya, Jaime Arenas, Carlos Blanchard y Juan Antonio Iranzo, que además fue designado primer presidente, según me dicen.

La primera actividad “oficial” del Club fue una “mítica” ascensión al recién inaugurado nuevo Refugio de Respomuso, en Sallent de Gállego, desde donde los participantes, que serían unos quince o veinte, estrenaron el novísimo fax del Refugio enviando uno firmado al Colegio, para después disfrutar de una suculenta comida de hermandad. Y si no recuerda mal algún participante, al finalizar esta primera excursión aún les esperaba la muy agradable sorpresa de encontrarse, al llegar a la explanada de La Sarra, donde hoy está el Asador, a un par de camareros del Hotel Formigal, elegantemente uniformados, detrás de una mesa “con mantel” allí instalada, preparando unas tostadas con un soberbio paté casero elaborado por la familia Laguna Fanlo, y sirviendo cava en copas de cristal. Lo nunca visto por allí.

Tras esta primera actividad montañera y gastronómica siguieron otras muchas. Particularmente recuerdan actividades de hermanamiento con algún colegio de abogados francés e incluso con uno de las Islas Canarias, de gran recuerdo entre sus asistentes. Eran actividades sobre todo de esquí, donde los participantes compartían deporte y convivencia social con otros colegiados de otros sitios y enseñaban a esquiar a no pocos colegiados y familiares.

Ya han pasado veintiséis años y pico desde la constitución del club. Se han sucedido diversos responsables en la junta de gobierno que han hecho posible, hasta hoy, que el club de esquí y montaña del REICAZ siga existiendo. A lo largo de los años y por distintas iniciativas se han ido incorporando, sumando al esquí y la montaña (senderismo, media y alta montaña), actividades tales como el belén montañero, que se celebrará este domingo 18, ferratas, bicicleta BTT, carrera de San Silvestre el 31 de diciembre, etc. Ha habido actividades memorables, bien por su belleza, bien por la complejidad de su organización y desarrollo. Todas, las memorables y las demás, han tenido como común denominador el disfrute de los participantes, que lo hemos pasado francamente bien. Ahí están las crónicas y fotos recopiladas a lo largo de los años para dar fe.

Sin embargo, no todo ha sido alegría. Dejo aquí constancia del imborrable recuerdo de Alejandro Arregui, que falleció en la montaña a la que tanto amaba a causa de un malogrado y desgraciado accidente.

Queremos que el club siga siendo aquello para lo que se creó, lo que ha sido y lo que es: una Sección colegial que ofrece un espacio de encuentro para el ocio deportivo y la convivencia, a disposición de colegiados, familiares y amigos.

Os animo a que participéis, a que conozcáis el club, que es, insisto, una Sección colegial más. Se publicará en esta revista trimestralmente el calendario de actividades para que, si son de vuestro interés, que lo serán, nos acompañéis en la montaña, en la BTT, en el esquí y demás propuestas que se hagan. Que vengáis con vuestras familias, con amigos para disfrutar de la naturaleza el fin de semana que os apetezca. Siempre habrá una actividad que realizar. También esperamos vuestras propuestas, si os apetece hacer alguna excursión que no habéis hecho y que os encantaría hacer.

Quiero finalizar agradeciendo muy especialmente a las personas que han integrado las sucesivas juntas de gobierno de la Sección colegial su trabajo y dedicación. Gracias a ellas el club perdura y, espero, siga existiendo muchos años.

Como dice la crónica de la ascensión al Aneto, conmemorativa del vigesimoquinto aniversario del club y que se publica en este número, citando a Machado, sigamos haciendo camino al andar.

Un cordial saludo