Por último, queda claro: ¡La inteligencia artificial revolucionará definitivamente no solo el mundo legal sino muchos campos más! Así, cuanto más rápido nos pongamos al día en esta tecnología, estaremos más lejos de ser aplastados por esta revolución. Porque una cosa es cabalgar una ola, como hace un surfista, y otra es ser arrastrado por la misma.
En conclusión, el ChatGPT y la inteligencia artificial en general pueden ser una gran ayuda para la abogacía si se utilizan correctamente.
Debemos aprovechar las capacidades que nos ofrece esta tecnología para mejorar nuestro trabajo, pero sin perder de vista que el conocimiento y la experiencia humana son insustituibles en nuestra profesión.
Espero que este artículo haya sido de tu interés y te haya ayudado a comprender mejor la relación entre la abogacía y la inteligencia artificial.